El 5 de noviembre de 1999 la Asamblea Nacional Constituyente creó el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en sustitución de la hasta entonces Corte Suprema de Justicia, para constituir una nueva institución con autonomía funcional y financiera, lo que se consolidó en diciembre de ese mismo año con la aprobación de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela por el pueblo soberano, mediante referéndum popular.

El Tribunal Supremo de Justicia integra el Sistema de Justicia de Venezuela, constituyéndose como la cabeza del Poder Judicial venezolano. Está compuesto por 20 Magistrados y Magistradas, quienes se distribuyen en seis Salas: Sala Constitucional, Sala Político-Administrativa, Sala Electoral, Sala de Casación Civil, Sala de Casación Penal y Sala de Casación Social. 

El TSJ cuenta con una Sala Plena que está integrada por los Magistrados y Magistradas de todas las Salas mencionadas, y una Junta Directiva cuyos miembros presidirán las respectivas Salas. Cada Sala tiene un secretario y un alguacil. La Junta Directiva del Tribunal Supremo y de cada una de sus Salas dura dos años en sus funciones y podrán ser reelegidos, por el mismo lapso.

Entre otras competencias, corresponde al Máximo Juzgado de la Nación la dirección, el gobierno y la administración del Poder Judicial, así como la inspección y vigilancia de los tribunales de la República Bolivariana de Venezuela. La elaboración de su propio presupuesto y del presupuesto del Poder Judicial también es inherente a sus funciones. El TSJ se encuentra en trabajo permanente para garantizar los principios, valores y normas de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.