"El Poder Judicial tiene una gran responsabilidad al hacer efectiva, a través de sus decisiones, la aplicación de las instituciones que el derecho laboral pone al alcance de los trabajadores y las trabajadoras, ya que las leyes por sí mismas no determinarían el cambio social, sino que a través de su instrumentación por intermedio del operador de justicia, es como su influjo llega a la vida social".

Así lo expresó la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia, magistrada Gladys María Gutiérrez Alvarado, durante su participación en el "Encuentro en el Marco de la Formación de los Nuevos Profesionales del Ministerio del Poder Popular para el Proceso Social de Trabajo", efectuado en el auditorio principal del TSJ, dirigido a 180 abogados y abogadas del mencionado ente ministerial, donde también intervino el ministro Jesús Martínez y el presidente de la Sala de Casación Social del Alto Juzgado, magistrado Luis Eduardo Franceschi Gutiérrez.

Señaló la Magistrada-Presidenta que la legislación laboral venezolana ha sido concebida con criterios de avanzada para alcanzar un Estado social, de Derecho y de Justicia. En ese sentido se refirió a la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras, sobre la cual manifestó que es una pieza angular de la reivindicación laboral y obrerista en lo jurídico alcanzada en estos años. Agregó que el Derecho Laboral en dicha normativa legal se ha fortalecido en virtud del cúmulo de acciones orientadas a la protección del derecho de los trabajadores y trabajadoras.

También hizo referencia a la Ley Orgánica Procesal del Trabajo, surgida gracias a la iniciativa legislativa de parte del Máximo Tribunal. Destacó que es un instrumento legal destinado a garantizar la protección de los trabajadores y trabajadoras en los términos previstos en el Carta Magna y las leyes, así como el funcionamiento para trabajadores y empleadores de una jurisdicción laboral autónoma, imparcial y especializada. "Constituye el punto de partida del derecho procesal laboral contemporáneo, caudaloso en novedades eficientes para la obtención de un proceso laboral expedito, sin formalismos innecesarios, caracterizado por la justa y recta aplicación de los principios laborales consagrados en la Constitución".

Asimismo precisó que hay una serie de criterios jurisprudenciales, específicamente de la Sala Constitucional y de la Sala de Casación Social, que resuelven situaciones laborales particulares y también establecen criterios orientadores que sirvan de sendero para el examen jurisdiccional de causas que pueden conocerse ante los órganos de administración de justicia en resguardo de los derechos de los trabajadores y las trabajadoras.   

Indicó la magistrada Gladys María Gutiérrez Alvarado que en el marco del Estado social de Derecho y de Justicia, cuya actuación y ordenamiento está supeditado a los valores superiores de la igualdad, justicia, solidaridad, ética y a la preeminencia de los derechos humanos, el trabajo se encuentra concebido como un proceso social bajo la protección o tutela del Estado.

Por su parte el ministro del Poder Popular para el Proceso Social de Trabajo, Jesús Martínez, explicó las competencias, el funcionamiento y la misión del ministerio. Además agradeció a la Presidenta del TSJ por la realización del encuentro, que forma parte del proceso de formación que realizan 180 abogados y abogadas dentro de su preparación para la instalación de la nueva estructura del ministerio a su cargo. Señaló que la actividad realizada en el Alto Juzgado permite establecer y consolidar un proceso de integración en todo el país, ya que generará una relación entre las inspectorías del trabajo y los tribunales laborales con el objeto de construir criterios homogéneos en la toma de decisiones.  

Para el magistrado Luis Franceschi Gutiérrez, el encuentro fue un acto histórico y manifestó que la labor del ministerio del Poder Popular para el Proceso Social del Trabajo debe estar en consonancia y armonía con la que realiza la Sala de Casación Social del TSJ y los 344 juzgados laborales que funcionan en toda Venezuela, para lo cual se deben implementar mecanismos que permitan el acercamiento y la colaboración entre las instituciones del Estado. Aprovechó la ocasión para destacar que Venezuela cuenta con el mejor proceso laboral y los niveles de mediación más altos del mundo.